Tomo 2 – Manejo de cuencas hidrográficas como estrategia para la implementación de corredores de conservación-producción en áreas de bosque seco en el Caribe Colombiano

“Profundizar sobre las particularidades del lugar donde se habita, en relación con la disponibilidad del agua y con la capacidad de conservarla, sin duda contribuirá a la definición de estrategias que procuren escenarios futuros de bienestar. En este documento encontrará aspectos que le ayudarán a emprender el camino para salvaguardar cantidades adecuadas de agua de calidad aceptable, que permitan sustentar tanto la salud humana como la del ecosistema,
garantizar la protección de la vida y la propiedad contra riesgos relacionados con el agua: inundaciones, derrumbes, subsidencia de suelos y sequías.”

Propuesta de ordenamiento del distrito de Conservación de suelos y aguas de Caquetá

“El presente informe corresponde al Documento Técnico Final de la Fase Diagnóstica, como parte del proceso de análisis para la elaboración de la Propuesta de Ordenamiento del Distrito de Conservación de Suelos y Aguas del Caquetá –DCSAC-, en los sectores de Belén de los Andaquíes y San José del Fragua.
Toda vez que el DCSAC configura un territorio que oferta recursos, donde a su vez usuarios tanto locales como regionales y de carácter externo hacen uso de ellos, la caracterización diagnóstica que se presenta a continuación parte de entender el DCSAC como un sistema socioecológico –SSE-. En esa perspectiva el Documento Técnico se presenta a través de cuatro componentes así: a) los recursos, b) los usuarios de los recursos, c) los proveedores de infraestructura pública y d) la infraestructura pública.”

¿Qué es el Distrito de Conservación de Suelos y Aguas?

En la región del piedemonte amazónico existen 29 ecosistemas y una franja de bosque que conecta los Andes con la Amazonía, que abarca 1’468.000 hectáreas donde nacen los ríos Caquetá y Putumayo, afluentes del Amazonas. Aquí coincide la diversidad cultural y natural. Sin embargo, el piedemonte se ve amenazado por prácticas agropecuarias, en peligro entre otros, que en el tiempo, no son sostenibles. El uso inadecuado de las fuentes de agua, sumado a la poca información que existe sobre la región, magnifica todas estas amenazas.

Guía de aves de la reserva natural de la sociedad civil JIKURI

Esta sencilla guía de bolsillo, contiene alguna de las aves más comunes de la reserva, aunque es posible que el lector encuentre muchas más caminando por la zona. Cada especie cuenta con una foto al costado izquierdo y una ficha descriptiva con información básica, a la derecha, que le permitirá al observador conocer el nombre científico, el hábitat, la dieta y una breve descripción de la especie.

Tomo 1 – Aspectos Ecológicos del bosque seco tropical

De manera general, el término bosque seco tropical es usado para referirse a zonas o regiones en donde predominan la escasez de humedad, las altas temperaturas, la baja precipitación, los vientos y en ocasiones, los suelos pobres en materia orgánica y salinos por sodio que han dado origen a coberturas vegetales y a poblaciones fáunicas determinadas. Son zonas que pueden mantener una alta diversidad de especies y que varían en la medida que se modifican los factores climáticos y las actividades antropozoógenas. Teniendo en cuenta que el criterio para definir este ecosistema es climático, vale la pena mencionar que en ocasiones, se habla de bosque seco tropical al referirse correctamente a ciertas formaciones secundarias de matorrales de bajo porte o a sabanas totalmente dominadas por gramíneas, que pueden ser naturales o antrópicas. Por lo tanto, el concepto de bosque seco tropical es muy amplio en cuanto a su composición y fisionomía y las especies de flora nativas, introducidas o favorecidas, que crecen bajo estas condiciones, son igualmente llamadas xerófilas o xerophytas en los casos más extremos de sequía y subxerófilas o subxerophytas en zonas con un poco más de humedad.

Materiales educativos sobre uso y conservación del bosque seco tropical

“Aunque las primeras comunidades humanas se alimentaban de frutos recolectados en los bosques nativos y de animales silvestres cazados, estos grupos evolucionaron para comenzar a practicar la agricultura hace unos 10.000 a 12.000 años.
A medida que los primeros grupos humanos crecían, se hacía más difícil encontrar alimento suficiente en un área de terreno pequeña, por lo cual tenían que migrar con mayor rapidez a zonas nuevas donde pudieran proveerse de alimento para su sustento.”

100 plantas del Caribe Colombiano

Entre 2013 y 2015, en desarrollo del programa Paisajes de Conservación (PPC), cofinanciado por USAID y ejecutado por Patrimonio Natural y cuyo objetivo en el Caribe colombiano se enfocó en la conservación y uso sostenible del bosque seco tropical, fomentando la conectividad entre remanentes de bosque y los sistemas productivos sostenibles en zonas de influencia de áreas protegidas de la región. En estos sitios se adelantaron actividades que facilitaron la caracterización, diagnóstico productivo y planificación de fincas y otras áreas de conservación tendientes a desarrollar acciones de producción-conservación y restauración. En estos espacios y con la participación de pobladores locales (campesinos, indígenas y actores institucionales), directamente en campo y mediante entrevistas, se recogió información relacionada con las especies vegetales (árboles, arbustos, palmas, cactus entre otras) presentes en los bosques, rastrojos y patios de las comunidades visitadas y aprovechadas por las comunidades locales: nombre común, usos más frecuentes, aspectos productivos y silviculturales y de fauna asociada a cada una de ellas.

Técnicas Vernáculas

En el marco del Programa Paisajes de Conservación (PPC), ejecutado por Patrimonio Natural y financiado con recursos de USAID, nace este libro dedicado de manera central al rescate y divulgación del empleo de un rico y diverso grupo de técnicas de construcción que emplean la palma de corozo de lata, la palma amarga, la palma de vino y la palma estera, en una amplia variedad de manifestaciones de arquitectura vernácula, persiguiendo a la vez un claro objetivo de conservación y uso sostenible de la biodiversidad y en general de los recursos naturales y ecosistemas asociados con estos materiales.

Primera reintroducción del caimán llanero en Colombia, una herramienta para su conservación

Desde tiempos inmemoriales, los cocodrilos, caimanes,
babillas y aligátores han sido percibidos por las
sociedades humanas como una amenaza, tanto para
sus vidas como para las de sus animales domésticos.
Por este motivo eran cazados por miedo, para consumir
su carne o para utilizar algunas de sus partes como
medicinas, amuletos u objetos decorativos. Con pocas
excepciones, este tipo de caza de consumo no afectó
de manera destacada a las poblaciones de cocodrilos
a nivel mundial.
A finales del siglo XIX comienza una nueva etapa en
las relaciones hombre-cocodrilo. En EEUU se inicia el
comercio de pieles de aligátores, lo que se traduce en
matanzas masivas e incontroladas de decenas de
miles ejemplares de esta especie. Cuando los aligátores
comenzaron a escasear los cazadores se desplazaron
al sur en busca de nuevas especies a las que extraer
su valiosa piel. De este modo, a principios del siglo
pasado, tras diezmar las poblaciones de cocodrilos de
México y el Caribe, llegan a Venezuela y comienza la
caza comercial del Caimán Llanero (Crocodylus
intermedius).

Informe de gestión – 2015 – Fondo Patrimonio Natural

“La selección a principios del 2015 de Patrimonio Natural como administrador de los recursos destinados al programa “Visión Amazonía”, resultó del reconocimiento de una gestión de nueve años que los equipos del Fondo realizaron, de manera que es posible responder a la escala de este compromiso. La participación de Patrimonio Natural en los equipos de ejecución del programa abre importantes canales para el cumplimiento de su misión.

El alcance fundamental de la misión del Fondo es realizar una contribución significativa a la sostenibilidad financiera del Sistema Nacional de Áreas Protegidas y del manejo de la biodiversidad. Esto exige reiterar la necesidad de orientar la cooperación internacional y las fuentes nacionales canalizadas a través de éste, de la manera más estratégica y con el mayor valor agregado posibles. Igualmente, tanto en el caso de las intervenciones realizadas por el Fondo como en aquellas ejecutadas por otros con recursos administrados por Patrimonio Natural, el desarrollo de la misión implica el diseño de las líneas de gestión, así como la evaluación y la consolidación de instrumentos económicos y financieros en forma que se contribuya a alcanzar las escalas de gestión de mayor impacto.”